lunes, julio 09, 2007

Boeing presentó su 787 Dreamliner

787 Dreamliner. Foto: Reuters

La empresa intenta con esta nueva aeronave revolucionar la aviación civil: es capaz de volar sin escalas casi a cualquier ciudad del planeta.

SAN FRANCISCO (EFE).- El gigante aeronáutico Boeing presentó ayer ante una audiencia de miles de personas en su planta de Everett, en el estado de Washington, su 787 Dreamliner, un aparato con el que la compañía busca revolucionar la aviación civil.

Boeing celebró el lanzamiento por todo lo alto, con una lluvia de nuevos pedidos por parte de Air Berlin, que comprará 25 aparatos, y una compañía de alquiler de aviones de Kuwait, que adquirirá otros 10.

Más de 47 aerolíneas de todo el mundo ya compraron 677 unidades del 787, el mayor número de pedidos hechos por un avión antes de que entre en servicio, según dijo la compañía.

Esto convierte al aparato, que se lanza en una fecha simbólica, el 7/8/07 (en EE.UU. el mes se coloca antes del día), en un éxito, tal y como quedó claro en la ceremonia de lanzamiento, que la compañía retransmitió en directo por internet y por televisión por satélite en nueve lenguajes.

Boeing contrató al conocido presentador de televisión estadounidense Tom Brokaw para que actuase como maestro de ceremonias en un acto al que invitó a unas 15.000 personas.

En el espectáculo, en su planta de ensamblaje de Everett, participaron azafatas de vuelo de cada aerolínea que ha hecho pedidos del avión.

En cuanto al verdadero protagonista, el Dreamliner, apareció lentamente tras las gigantes puertas de la fábrica al sonido de una música especialmente compuesta para la ocasión.

El gigante aeronáutico también invitó a miles de empleados y jubilados a ver el evento por satélite en el estadio NFL de Seattle, y organizó fiestas en docenas de lugares en todo el mundo.

Como señaló Louis Gallois, presidente de su rival Airbus, en un inusual mensaje de enhorabuena dirigido a Jim McNerney, presidente de Boeing, "a pesar de que mañana Airbus volverá a su tarea de competir vigorosamente, hoy es el día de Boeing, un día para celebrar el 787".

No es para menos: se trata del primer avión construido con un compuesto de alta tecnología, un tipo de plástico reforzado más ligero y fuerte que el aluminio, material que se utiliza tradicionalmente para la fabricación de aeronaves.

Gracias a su menor peso, el avión utilizará un 20 por ciento menos de carburante que su antecesor, el 767, lo que significa menos costes, polución y mantenimiento, ya que sufrirá menos corrosión.

El avión será más espacioso, con mayores ventanas y espacio para las maletas, aunque el diseño definitivo del interior dependerá de cada aerolínea.

Los pasajeros, asegura Boeing, se sentirán más cómodos porque gracias al material con el que está hecho, la nave está presurizada de manera diferente, lo que entre otras cosas significará más oxígeno y más humedad en la cabina de vuelo.

En su apuesta por el desarrollo de un avión de tamaño medio capaz de volar sin escalas entre casi cualquier ciudad del planeta, Boeing se gastó unos 8000 millones de dólares.

Mientras tanto, su competidor Airbus optó por el súper-jumbo A-380, un avión por el que sólo 14 aerolíneas mostraron interés por el momento.

Boeing confía en que el avión, el primero que la compañía lanza en los últimos 13 años, insufle nueva vida a una empresa que en los últimos tiempos se enfrentó a escándalos corporativos y graves problemas de producción.

Lo hace en un momento en que la industria de la aviación está en crisis a causa de los crecientes costes de carburante, mayores medidas de seguridad y un mercado muy competitivo.

Boeing se enfrenta, además, a otros obstáculos, apuntan los expertos.

El avión, que cuesta entre 146 y 200 millones de dólares, dependiendo del modelo, tendrá capacidad para entre 210 y 330 personas y se construirá utilizando un nuevo modelo de producción que se basa en contratistas de fuera, que fabrican las partes que después se ensamblan en Everett.

Si la producción sigue el ritmo previsto, la japonesa ANA, uno de los principales clientes con 50 pedidos, se convertirá en la primera aerolínea en utilizar el 787, en mayo del año próximo.

El primer vuelo en pruebas está previsto para finales de agosto o septiembre.


Es el primer avión construido con un compuesto de alta tecnología, un tipo de plástico reforzado más ligero y fuerte que el aluminio, Foto: AP


Utilizará un 20 por ciento menos de carburante que su antecesor Foto: Reuters


De frente. Foto: AP


Este nuevo modelo costó 8000 millones de dólares Foto: AP

Fuente: La Nación